Superficie
El Municipio de Tequisquiapan se localiza en la parte Sureste del Estado de Querétaro Cuenta con una superficie de 343.6 kilómetros cuadrados y representa el 2.3% de la superficie del Estado.
Población
54,929 habitantes.
Presidente Municipal
José Antonio Mejía Lira
Contacto
(01-414) 2-73-35-75
Página
http://www.tequisquiapanqueretaro.gob.mx/
Probablemente la presencia del hombre en el territorio del actual Estado de Querétaro se remonte a un período de tiempo ubicado entre el 1500 y 2500 A.C., según los datos que arrojaron los estudios de los restos óseos descubiertos en la cueva de San Nicolás, lugar situado en un cerro de Tequisquiapan que limita con el municipio de San Juan del Río. En dichos restos se advierten los rasgos de hombres de mediana estatura de cabeza alargada, que corresponden al tipo característico de los que pueden ser considerados los primeros pobladores del territorio de Querétaro, los cuales todavía no conocían la agricultura ni la cerámica y pertenecían al tipo humano que atravesó el estrecho de Behring.
Desde muchos años antes que los conquistadores españoles pisaran tierra en este continente, el suelo de Tequisquiapan era habitado por indígenas Otomíes en el límite territorial Oriente del municipio, lindando con el actual Estado de Hidalgo y con los Chichimecas en el resto del territorio; predominando los asentamientos en las comunidades situadas al Sur y al Poniente de la Cabecera Municipal. La fertilidad de las vegas que se ensanchan al Oriente y al Poniente del río; la generosidad de los manantiales de aguas tibias cristalinas; la belleza exuberante de los árboles de gran follaje, convertidos en centinelas del trayecto caprichoso del caudaloso río; la gran variedad de árboles frutales que en forma silvestre se daban en estas tierras enriquecidas por el aluvión y los limos que dejaban las crecientes al desbordarse el río en temporada de lluvias. Todos estos motivos hicieron desde siempre a Tequisquiapan como el lugar idóneo buscado por el hombre.
La fama que había adquirido esta porción de tierra del actual Estado de Querétaro, traspasó la frontera del territorio Chichimeca, propiciando desde aquellos remotos tiempos, la afluencia de visitantes importantes que tenían conocimiento de las virtudes de las aguas termales que brotaban en abundancia de los manantiales, a las cuales se les atribuyeron dones curativos.
En el pueblo se realizaban importantes reuniones de caciques indígenas, quienes se reunían para acordar pactos políticos, dirimir querellas y realizar trueques de tipo comercial. Se dice que asistían con la convicción de que al sentarse a dialogar en este lugar, invadidos por la tranquilidad y la belleza del mismo, los inspiraría la buena voluntad para negociar y dirimir dificultades, pudiendo además realizar el mejor trato comercial.
El asentamiento indígena antes de la conquista era de indios Chichimecas y Otomíes. A la llegada de los españoles a la región, éstos establecieron una alianza con el cacicazgo Otomí de Xilotepec para que coadyuvaran en la conquista y poblamiento de los territorios que se encontraban al Norte de donde tenían asentados sus reales los caciques Otomíes. Las fundaciones comenzaron desde San Jerónimo Aculco, San Miguel Canvayn, Alfaxaxuca, Santiago Tecozautla, Gueychiapa, San Juan del Río, Santa María Tequisquiapan y San Juan de los Xarros. Estos pueblos “en tiempos de la gentilidad se encontraban poblados de naturales, los cuales fueron evangelizados por los misioneros españoles, ayudados en todo por los caciques Otomíes”.
La fundación de Tequisquiapan se dio en forma pacífica. Los indios Chichimecas que eran los menos, convivían en paz con los Otomíes que representaban la mayoría; lo que ayudó a que se viviera con relativa tranquilidad. Sin embargo, en otros lugares no lejanos a Tequisquiapan seguía la resistencia Chichimeca, siendo hasta doscientos años después, con la caída del último baluarte de la resistencia indígena en la famosa batalla del cerro de la Media Luna de la Sierra Gorda Queretana, cuando el General Escandón acabó con la resistencia Chichimeca Pame en la región.
“Esta población fue fundada el año de mil quinientos cincuenta y uno, por cédulas Reales de Carlos V y firmadas por el Virrey de la Nueva España D. Luis de Velasco y realizada por el conquistador indígena Don Nicolás de San Luis Montañez, el veinticuatro de julio de 1551, acompañado de sus caudillos y capitanes D. Alonso de Guzmán, D. Alonso de Granados, D. Ángel de Villafaña y el Padre D. Juan Bautista. Se congregaron al despuntar el alba los indios Chichimecas y Otomíes en el lugar señalado para la fundación; se plantó una cruz y se formó con un montón de piedras y cubierto con yerbas y flores, un altar, donde el Padre Juan Bautista celebró el santo sacrificio de la misa como acto oficial de la fundación”.
El territorio del municipio de Tequisquiapan se encuentra ubicado en la parte Norte, a los 20° 39’ y en el extremo Sur a los 20° 39’ de latitud Norte. La región más oriental se localiza a los 99° 50’ mientras que sus límites occidentales están a los 100° 05’ de longitud. La Cabecera Municipal se localiza a los 20° 31’ 00’’ de latitud Norte y 95° 52’ 30’’ de longitud Oeste.
Agricultura:
Después del turismo, la agricultura es una la actividad más importante en el municipio; aún cuando en la actualidad no es muy rentable por los elevados costos de los insumos, tecnología obsoleta, créditos insuficientes e inadecuada comercialización. Los cultivos predominantes en la región son: maíz, frijol, sorgo, alfalfa, chile, tomate y jitomate.
En el municipio la superficie ejidal y comunal es del orden de 19,703 ha; de las cuales se destinan para superficie agrícola 11,078 ha; equivalentes al 4.3% del total de la superficie estatal; de éstas 2,765 ha cuentan con disponibilidad de riego; 4,331 ha son de temporal y 3,981 ha son de riego temporal.
Existen 13 ejidos y una colonia agrícola-ganadera. Los ejidos con mayor disponibilidad de riego son: Ejido de Tequisquiapan con 915 ha y la Fuente con 843 ha. La colonia agrícola y ganadera de la Laja-Urecho no dispone de riego en la superficie destinada a la agricultura, pues la totalidad está considerada de temporal.
Los principales cultivos cíclicos en las superficies con riego son: sorgo, maíz, tomate, frijol, chile, y avena forrajera, mientras que los cultivos perennes más importantes que se siembran se componen básicamente de alfalfa y uva. En cuanto a los principales cultivos sembrados de la superficie de temporal destacan por su importancia el maíz y frijol e intercalados ambos.
Ganadería:
En Tequisquiapan se ubican ganaderías donde se cría el toro de lidia. Ganaderías como Xajay, La Gloria, San Martín y Fernando de la Mora, por la calidad del ganado, han dado fama a Tequisquiapan en el ámbito taurino nacional e internacional.
Actualmente el municipio no se caracteriza por ser una zona ganadera. En el 2002 según datos del anuario estadístico del estado de Querétaro, se tenían 14,755 bovinos, 11,184 porcinos, 3,691 ovinos, 3,023 caprinos y 3,863 equinos. Sin embargo dentro del territorio municipal se cuenta con explotaciones intensivas de ganado porcino, ovino y avicultura. En menor escala se tiene engorda de ganado bovino y la producción de miel y cera.
También se ha venido intensificando la piscicultura de manera significativa en los bordos que existen en las comunidades.
Industria:
La industria manufacturera se desarrolla a través de los tradicionales talleres artesanales y pequeñas fábricas de muebles de pino y rattán, así como de hornos para la producción de tabique. Existen además maquiladoras textiles: Confecciones San Nicolás S.A. de C.V., Confecciones 1910 S.A. de C.V., Piel GI S.A. de C.V. y Maklo S.A. de C.V.
Otras empresas asentadas en el municipio son: César Internacional S.A. de C.V., Jabonera Lappsa de Querétaro S.A. de C.V., Smart Balls Internacional, Mosaico y Blok-Creto Olvera S.A. de C. V. y Cerámica y Talavera de Tequisquiapan.
Turismo:
La fama adquirida desde tiempos prehispánicos como lugar de privilegio para ser visitado se mantiene vigente, a pesar de haber perdido el principal atractivo que lo identificaba como tal. Los abundantes manantiales de agua termal, limpia, cristalina, que al bañarse relajaba y curaba, únicamente quedan en el recuerdo. Sin embargo, el agua no se ha agotado pues existe en el subsuelo, con la diferencia que ahora se tiene que bombear para llenar las albercas de los hoteles y las casas que conservan los baños que se llenaban en forma natural.
Todo resulta atractivo: el clima, la traza de sus calles que se ensanchan y angostan caprichosamente; las fachadas de las casas de arquitectura vernácula, cubiertas con denso follaje de florido multicolor de las camelinas; así como la gran variedad de artesanías que se muestran en tianguis y tiendas del pueblo, donde se encuentra una amplia variedad de artículos de vara, mimbre, ratán, cerámica, textiles y maderas talladas, además de artículos que han cobrado un gran auge en los últimos años como son los muebles, para todos los gustos y precios. La disponibilidad hotelera oferta hospedaje desde una económica posada a hotelería de cinco estrellas. Pero sobre estos atributos, el visitante encuentra calidad en la atención y calidez de la gente hacia el turista, independientemente de su origen.
En estos espacios se pueden encontrar artesanías de gran calidad y creatividad como canastas, sombreros, adornos y tortilleros. Las de vara y mimbre son su especialidad y una tradición por la que se distingue Tequisquiapan. Ubicación: Salvador Carrizal y Ezequiel Montes.
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